Este Portal utiliza cookies para preservar la información de sesión y guardar las características del navegador. Las cookies no se utilizan para acceder a información personal ni para controlar sus acciones. Las cookies utilizadas son ficheros enviados a un navegador por medio de un servidor web para registrar las actividades del usuario en la página y permitirle una navegación más fluida y personalizada. El usuario tiene la posibilidad de configurar su navegador para impedir la entrada de éstas, bloquearlas o, en su caso, eliminarlas. Para utilizar este sitio Web, no resulta necesario que el usuario permita la descarga o instalación de cookies.
La salud cerebral
En el marco del programa Estilo de Vida Saludable, del Sistema de Seguridad y Salud en Trabajo, a cargo de la Secretaría de Gestión Humana, conscientes que el ritmo de vida actual marcado por el estrés y la ansiedad constante ponen en jaque nuestra salud cerebral, te traemos información de la importancia y cuidados que necesita nuestro cerebro.
Este órgano como cualquier otra parte de nuestro cuerpo necesita estar en forma, y aunque es cierto que con la edad es común empezar a tener cierto deterioro mental, se ha demostrado que la estimulación cerebral continua favoreciendo el desarrollo de nuevas conexiones neuronales. Hábitos como la lectura y la buena hidratación pueden frenar el deterioro cognitivo, al igual que muchos nutrientes que nos previenen y mejoran de posibles complicaciones.
A continuación, te enumeramos algunos de estos alimentos beneficiosos, como también los que hacen daño a nuestro cerebro.
- Factores protectores: Vit E: frutos secos, yemas de huevos.
- Vit B12: huevos, carnes magras, mariscos, leche.
- Verduras y hortalizas: acelga, espinaca, zanahoria, brócoli, coliflor.
- Legumbres: fríjoles y garbanzos.
- Frutas: uvas y arándanos.
- El agua, un descanso reparador y el ejercicio diario completan esta lista de factores protectores.
En el grupo de alimentos que pueden poner en riesgo nuestro cerebro están:
- Grasas saturadas: piel de pollo, grasa de cerdo.
- Grasas trans: margarina, alimentos congelados para freír, comidas rápidas, galletas.
- Azúcares refinadas: azúcar blanca, cereales para desayuno, refrescos, chocolatinas, caramelos, galletas.
- Alimentos procesados: embutidos, enlatados, colorantes de alimentos, mecatos (papitas), pizzas congeladas para microondas y las bebidas alcohólicas.