Alegría y pasión unidas para el servicio Raúl y Gildardo, dos funcionarios entregados a nuestra Capital de Vida
El 7 de abril de 2010 ingresó Raúl Páez a la Alcaldía de Barranquilla, un hombre espontáneo, alegre, que como él mismo dice, exporta felicidad. Abogado de profesión, desempeña su labor como asesor jurídico de la Secretaría de Gestión Social, ahí atiende y responde todas las PQRSD de la secretaría donde desempeña sus funciones.
Cuenta que siempre quiso ser médico, por ser esta una profesión que le permite ayudar mucho a los demás sin embargo, por razones económicas no pudo estudiarla, es así como buscando otras opciones descubre que desde el Derecho puede también ayudar a la gente, servir. Y, de esta manera, desde la Secretaría de Gestión Social, ha logrado cumplir su objetivo y sacarle provecho a su don de servicio, aún cuando no todos los usuarios llegan contentos. “Aprendí en la vida que lo más importante es escuchar a los demás, dejar que la persona te exprese toda su inconformidad, y después buscar la manera de ayudar, pero ya solo con la escucha estamos logrando algo”.
Raúl no solo se desempeña como abogado, sino que también apoya todas las actividades y eventos que se realicen internamente en la Alcaldía, lleva varios años siendo el Rey Momo de su secretaría, compartiendo esa alegría que lo caracteriza con todos sus compañeros. Y así lo hace en cada actividad en la que se involucra. En este momento se encuentra apoyando el programa “Siembra un libro en el corazón de un niño”, interpretando el personaje de Rin Rin Renacuajo para invitar a todos a donar un libro en esta Navidad..
Este compañero, funcionario entregado al servicio, nos contó que sueña con algún día dirigir su secretaría y nos envía un mensaje siempre de felicidad, pues dice que ser feliz no es una decisión externa, sino una decisión interna, “Tomé la decisión de ser una persona feliz, hoy amanecí que exporto felicidad y es algo que llevo siempre por dentro, ser feliz”.
Gildardo Meza lleva ya 14 años trabajando en la Alcaldía de Barranquilla, siempre desde su alma máter, como él la llama: la Secretaría de Salud. Inició como conductor de ambulancias, y hoy hace carrera como técnico operativo. Su progreso se lo debe a su pasión, “me fascina lo que hago, lo entrego todo en pos del servicio, soy muy dedicado a mi trabajo, mis jefes vieron eso y me fueron ascendiendo”. Gildardo pasó inicialmente de conducir ambulancias, a repartir el tiempo entre su actividad regular y ayudar a su jefe de ese momento, es así como el cuenta que se “encarretó” y fue aprendiendo del tema hasta que logró vincularse de lleno a las oficina de la secretaría. Cabe destacar que hoy no solo es el encargado del aseguramiento de las personas hospitalizadas y del usuario vulnerable, sino que también apoya los eventos que se realizan fuera del edificio central.
Al llegar a su puesto de trabajo uno se encuentra con un Gildardo amable que, con música de fondo, atiende a los usuarios buscándoles siempre la mejor y más efectiva solución a sus requerimientos. Lo que más le gusta de su trabajo es recibir el agradecimiento de esas personas a las que ayuda. “Me llena de satisfacción cuando regresan a agradecerme, he tenido casos en los que me agradecen incluso con lágrimas en sus ojos, por lo menos para mí eso es más que suficiente”.
Hoy Gildardo no solo se limita a realizar sus funciones, sino también a colaborar en lo que sea necesario, tanto es así que sus mismos compañeros lo recomiendan para que preste apoyo en cualquier situación. “Soy de todito, ya todo el mundo sabe que cuando necesite algo en la Secretaría de Salud, ahí estoy yo”. Su pasión sobrepasa el tiempo, y es feliz asistiendo a los eventos los fines de semana, apoyando al CRUE cuando sea necesario y lo que se requiera en las distintas dependencias de la secretaría.
Gildardo es además un funcionario orgulloso de su Capital de Vida, “Cuando me preguntan donde trabajo, siempre digo que en la mejor empresa del país, eso es la Alcaldía para mí”, dice. Y aunque se siente afortunado, somos nosotros los más afortunados de contar con él como parte del equipo.
Hoy agradecemos a estos dos personajes de nuestra Capital de Vida por su entrega, pasión, alegría y servicio, este es un pequeño reconocimiento a la labor que desarrollan y motivo de inspiración para todos los que tenemos la fortuna de trabajar en la Alcaldía de Barranquilla.
Rául Páez
Gildardo Mesa