Sandra Rico Sermeño
“Barranquilla ha tenido cambios muy importantes, el desarrollo se percibe en todos los aspectos, y eso es muy gratificante para quienes laboramos en las distintas dependencias de la Alcaldía”.
A la Alcaldía Distrital se vinculó en julio de 2008. Desde entonces Sandra Rico se desempeña en la Secretaría Distrital de Salud, donde inicialmente fue asignada a la oficina financiera. Allí estuvo tres años entre cuentas por pagar a las instituciones prestadoras de salud-IPS, y luego pasó a la oficina de Atención a la Comunidad, correspondiéndole dar trámite a órdenes médicas.
En el 2012 fue trasladada a la oficina de Garantía de Calidad, dependencia en la cual comparte con un equipo de auditores de la Secretaría de Salud la función de verificación en el cumplimiento de los estándares mínimos de calidad de los prestadores de servicios de salud en Barranquilla.
“En la oficina estamos comprometidos con la gestión y los resultados, y el ambiente laboral es muy agradable, porque aquí reina el compañerismo y eso es muy estimulante”, dice Sandra, para seguidamente referirse a su jefe, la médica Rosmery Wehedeking, en quien reconoce no solo su preparación académica y experiencia, sino también los sólidos principios éticos que la caracterizan. “Además, su liderazgo contribuye, indiscutiblemente, a mantener la sinergia y la motivación en su equipo de trabajo”.
Sandra Rico es bacterióloga egresada de la Universidad Metropolitana con especialización en Gerencia en Salud y Seguridad Social de la Universidad Simón Bolívar, donde actualmente adelanta el segundo semestre en la maestría de Auditoría y Sistemas de la Calidad en Servicios de Salud.
Las metas de esta funcionaria comprometida con su labor, están encaminadas a seguir avanzando en el sector público local. “Estos 10 años en la Alcaldía han sido muy enriquecedores en lo profesional y en lo personal. Conocer, atender y resolver necesidades sentidas de la ciudadanía, es algo que me llena de satisfacción”, dice.
Vive orgullosa de formar parte de la Capital de Vida, tanto es así que casi todos los fines de semana, en compañía de sus hijas Susana y Valerie Oviedo, de 8 y 5 años, acude a los distintos parques de la ciudad para disfrutar de largos ratos de esparcimiento.