Con prevención, asistencia y protección, Distrito avanza en la lucha contra la trata de personas

Este 30 de julio se conmemoró en la ciudad el Día Mundial Contra la Trata de Personas.

Con actividades y muestras artísticas, la Alcaldía de Barranquilla, a través de la Secretaría de Gobierno y su Comité Distrital de Lucha Contra la Trata de Personas, conmemoró este 30 de julio el Día Mundial Contra la Trata de Personas, una fecha que permite visibilizar este delito e incentivar la prevención y la ruta de atención a las víctimas.

A través del Comité Distrital de Lucha Contra la Trata de Personas, la Secretaría de Gobierno implementa acciones de prevención, asistencia y protección, dirigidas a víctimas del delito, miembros de la comunidad y funcionarios, con el fin de fortalecer el conocimiento de este flagelo, garantizar los derechos fundamentales de cada persona y convertir a los grupos poblacionales impactados en replicadores de información sobre la prevención y rutas de atención vigentes.

Con el apoyo de la Fundación Renacer y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) se llevó a cabo la puesta de la obra Prometeo, del grupo artístico Cofradía Teatral, en la plaza de La Paz. Asimismo, en el Malecón del Río, un miembro del programa Barrismo Social, pintó un mural alusivo a la prevención y lucha contra este delito.

La secretaria de Gobierno del Distrito, Jennifer Villarreal de Hoyos, manifestó que “a través del comité tenemos la oportunidad de devolverle la fe y la esperanza a las víctimas a través de la oferta de servicios de las entidades territoriales y de nuestros aliados externos como agentes protectores. Los derechos de las víctimas importan y su dignidad no es negociable”.

Cifras oficiales indican que, en Colombia, entre 2012 y 2020 se registraron 686 casos de víctimas de trata de personas, de los cuales el 82% eran mujeres y el 18% hombres. Además, el promedio de edad de las víctimas oscila entre los 18 y 30 años (55%), seguido de personas entre los 31 y 50 años (22%) y, por último, se presentan los niños y adolescentes en un 12%. 

La finalidad más común de este delito es la explotación sexual, sin omitir que otras formas, como matrimonio servil, servidumbre, mendicidad ajena, trabajos forzados y extracción de órganos, ocurran.

Entre las poblaciones más afectadas por este delito se encuentran los migrantes venezolanos, quienes por su situación de vulnerabilidad caen dentro de las redes de tratantes.

El 30 de julio es reconocido por la ONU como una oportunidad para incentivar la lucha contra la ocurrencia de este delito, implementar y replicar acciones de prevención, y garantizar plenamente la asistencia a todas aquellas víctimas identificadas.